Científicos logran restaurar y «rejuvenecer» defensas en ratones mediante tecnología de ARNm
Tiempo de lectura: 2 minutos Los investigadores transformaron el hígado de los roedores en una «fábrica» temporal de proteínas, logrando que animales ancianos recuperaran su capacidad para combatir tumores y responder a vacunas.
Un nuevo estudio liderado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y el Instituto Broad, en colaboración con centros de investigación alemanes, lograron restaurar la capacidad inmune de un grupo de ratones. La investigación, publicada en la revista Nature, reveló que es posible «rejuvenecer» las defensas utilizando la tecnología de ARN mensajero (ARNm), la misma base utilizada en las vacunas contra el Covid-19.
El núcleo del problema del envejecimiento inmunitario reside en el timo, un pequeño órgano situado frente al corazón y responsable de la maduración de las células T. No obstante, este órgano comienza a encogerse desde la edad adulta temprana en un proceso llamado involución tímica. Para cuando una persona alcanza los 75 años, el timo es prácticamente inoperante, lo que reduce drásticamente la producción de nuevas células T.
Ante la imposibilidad de regenerar el timo de forma sencilla, el equipo de Zhang comenzó a buscar un órgano sustituto que pudiera enviar las señales de crecimiento necesarias. El elegido fue el hígado.
Los científicos seleccionaron el hígado debido a su capacidad para producir proteínas y su accesibilidad para recibir nanopartículas de ARNm. Además, al ser un órgano por el que transita toda la sangre del cuerpo, funciona como el punto estratégico ideal para interactuar con las células T circulantes.
Respuestas inmunitarias duplicadas
Para poner a prueba esta «fábrica» temporal de defensas, los investigadores utilizaron nanopartículas lipídicas que transportan secuencias de ARNm codificadas con tres señales inmunitarias clave. Al ser inyectadas, estas partículas se acumulan en el hígado, donde las células hepáticas (hepatocitos) comienzan a producir las proteínas que normalmente el timo ya no puede generar.
Los experimentos se realizaron en ratones de 18 meses, una edad equivalente a los 50 años humanos. Los resultados fueron sorprendentes: mostraron aumento de células T, doble eficacia en vacunas y una capacidad mayor del sistema inmune para identificar y combatir formaciones tumorales.
«Si podemos restaurar algo tan esencial como el sistema inmunitario, es de esperar que podamos ayudar a las personas a mantenerse libres de enfermedades durante más tiempo», explicó Feng Zhang en un comunicado.
El equipo de investigación ahora planea expandir estos estudios a otros modelos animales y analizar si este enfoque también puede revitalizar otras defensas, como las células B, responsables de la producción de anticuerpos.