China lanza histórica misión Tianwen-2 para capturar muestras de un asteroide

Tiempo de lectura: 2 minutos La misión se extenderá por más de un década, y tiene por objetivo recolectar muestras del asteroide Kamo’oalewa y explorar el cometa 311P, con el objetivo de obtener información crucial sobre la formación del sistema solar.
La madrugada de este jueves, a las 01:31 hora local de Pekín, el cohete portador de la misión Tianwen-2 despegó desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Xichang, en la provincia central de Sichuan, marcando el inicio de una nueva era para el programa espacial chino.
Unos 18 minutos después, la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA) confirmó el éxito del lanzamiento y el correcto despliegue de los paneles solares de la nave Tianwen-2, que ya se encuentra en su trayectoria interplanetaria.
Esta misión representa un salto para China, que busca unirse al selecto club de naciones capaces de realizar misiones de retorno de muestras desde cuerpos celestes lejanos, una hazaña tecnológica de enorme complejidad.
Doble destino: asteroide Kamo’oalewa y cometa 311P
El primer objetivo de Tianwen-2 es el asteroide 2016HO3, también conocido como 469219 Kamo’oalewa. Este pequeño cuerpo celeste es particularmente interesante por ser considerado un cuasisatélite de la Tierra, lo que significa que orbita el Sol manteniendo una trayectoria relativamente cercana y sincronizada con nuestro planeta.
Según los planes de la CNSA, la sonda tardará aproximadamente un año en alcanzar Kamo’oalewa. Una vez allí, realizará maniobras de aproximación y se mantendrá en órbita alrededor del asteroide para estudiar su superficie y seleccionar el lugar idóneo para la recolección de muestras.
Tras la delicada operación de toma de muestras, la nave emprenderá el viaje de regreso a las inmediaciones de la Tierra. Se espera que una cápsula especialmente diseñada se separe de la sonda principal y reingrese a la atmósfera terrestre con el preciado cargamento a finales de 2027.
Una vez liberada la cápsula, la nave Tianwen-2 no finalizará su misión, sino que pondrá rumbo a su segundo destino: el cometa 311P/PANSTARRS, ubicado en el cinturón principal de asteroides, entre las órbitas de Marte y Júpiter. Este encuentro permitirá estudiar de cerca un cometa activo, analizando los materiales que expulsa al espacio.
Muestras para comprender los orígenes del sistema solar
Los objetivos científicos son ambiciosos: estudiar parámetros físicos como la dinámica orbital, rotación, tamaño, forma y propiedades térmicas de ambos cuerpos, así como explorar su superficie, estructura interna y composición detallada.
«Los asteroides proporcionan información crucial sobre la historia evolutiva terrestre. Una hipótesis sostiene que el agua de la Tierra fue traída por cuerpos celestes. Sus colisiones catastróficas con nuestro planeta, como el evento que erradicó a los dinosaurios, han moldeado profundamente la evolución terrestre», afirmó Liu Jianjun, diseñador jefe adjunto de la misión.
Tianwen-2 se enmarca en el robusto programa espacial chino, que ha cosechado éxitos como el alunizaje de la sonda Chang’e 4 en la cara oculta de la Luna y la llegada a Marte con la misión Tianwen-1.