Chile y Noruega firman acuerdo para proteger la Antártica como reserva de paz y ciencia
Tiempo de lectura: 2 minutos El tratado designa la región como un continente dedicado a la paz y la ciencia, asegurando su protección como reserva natural.
Chile y Noruega, dos naciones con profundos lazos históricos con el continente blanco, han sellado un memorándum de entendimiento para fortalecer la cooperación antártica. El acuerdo, firmado recientemente en Francia, reafirma el compromiso de ambos países con el Sistema del Tratado Antártico (STA) y busca impulsar la investigación científica conjunta, especialmente en áreas críticas como el cambio climático y la conservación de los ecosistemas marinos.
El ministro de relaciones exteriores, Alberto van Klaveren, y el ministro de Desarrollo Internacional de Noruega, Åsmund Grøver, formalizaron una alianza estratégica que va más allá de la diplomacia.
«Con la firma de este acuerdo no solo estrechamos los vínculos históricos que existen entre Chile y Noruega, sino que reafirmamos nuestro compromiso para defender y promover a la Antártica como una reserva natural dedicada a la paz y a la ciencia», afirmó Van Klaveren.
Compromiso reforzado
El núcleo del acuerdo es el fortalecimiento del STA, el marco legal que ha gobernado el continente desde 1959. Noruega, uno de los 12 signatarios originales del tratado, y Chile, un país reclamante y con una activa presencia en la zona, se comprometieron a impulsar la adhesión y el respeto a sus principios.
Esto incluye una participación activa en las reuniones consultivas del Tratado Antártico y en la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (CCRVMA). Dicha comisión es fundamental para la gestión sostenible de la vida marina en el Océano Austral, una de las áreas más vulnerables al cambio climático y la pesca industrial.
Ciencia y cambio climático como ejes de la colaboración
Más allá del ámbito político, la alianza chileno-noruega pone un fuerte énfasis en la colaboración científica. Ambos países promoverán iniciativas conjuntas en temas clave para el futuro del planeta, centrando sus esfuerzos en comprender los efectos del cambio climático y los procesos ecosistémicos en la Antártica y las regiones subantárticas.
Esta postura se alinea con la política exterior del gobierno del Presidente Gabriel Boric, que ha destacado por su férrea defensa del continente blanco y su oposición a cualquier intento de explotación comercial. Chile mantiene una presencia significativa y permanente en la Antártica, con diez bases operativas, de las cuales cinco son gestionadas por el Instituto Antártico Chileno (INACH) y las restantes por las Fuerzas Armadas.
