Científicas lideran la creación de un súper ingrediente con alga chilena para combatir la diabetes
Tiempo de lectura: 2 minutos Un equipo de investigadoras chilenas desarrollará un innovador ingrediente en polvo a partir del alga Ulva spp, con el objetivo de reducir el índice glicémico de alimentos de consumo masivo y mejorar la salud metabólica de la población.
En las costas de Chile se esconde un aliado natural para la salud metabólica: el alga verde Ulva spp., conocida popularmente como lechuga de mar. Gracias a un proyecto IDeA I+D financiado por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), un equipo de investigadoras chilenas buscará transformar esta alga en un ingrediente funcional capaz de revolucionar la industria alimentaria.
La iniciativa, liderada por académicas de la Universidad Católica del Norte (UCN) y la Universidad de Los Andes (UANDES), tiene como meta desarrollar un producto bioactivo que ayude a modular la respuesta glicémica de los alimentos. Esto es especialmente relevante para Chile, donde enfermedades como la diabetes tipo 2 y la obesidad representan un grave problema de salud pública.
El proyecto nació de una colaboración previa entre ambas universidades, el programa Conecta I+D, que arrojó los primeros resultados positivos sobre el potencial de esta alga. Ahora, con el respaldo de ANID, las doctoras Paola Chandía Parra (UCN) e Ingrid Contardo Hernández (UANDES) liderarán el desarrollo a gran escala.
El potencial oculto de la lechuga de mar
El secreto del nuevo ingrediente reside en los polisacáridos, un tipo de carbohidrato complejo presente en la lechuga de mar. Estos compuestos no solo tienen propiedades bioactivas, sino que también pueden actuar como una fibra funcional con efecto prebiótico, promoviendo un microbioma intestinal saludable.
«El objetivo de este proyecto es desarrollar un ingrediente bioactivo en polvo a partir de polisacáridos extraídos de algas verdes Ulva spp. que ayudará a modular el índice glicémico de alimentos amiláceos», explica la Dra. Paola Chandía, académica del Departamento de Biología Marina y del Laboratorio de Moléculas Bioactivas de la UCN.
«Además, actuará como una fibra funcional con propiedades prebióticas que buscará mejorar la salud intestinal, contribuyendo a la prevención de enfermedades metabólicas como la diabetes y la obesidad», añade la investigadora.
Para lograrlo, el equipo científico aplicará procesos de extracción y secado de última generación. Estas técnicas innovadoras permitirán obtener un polvo estable, funcional y bien caracterizado, listo para ser incorporado en una amplia variedad de productos alimenticios de consumo masivo, como panes, pastas o cereales, sin alterar significativamente su sabor o textura.
Del laboratorio a la industria
Con los fondos adjudicados por ANID, el proyecto se centrará en dos etapas clave. Primero, validar un prototipo funcional del ingrediente que demuestre su capacidad para modular el índice glicémico. Segundo, estandarizar su proceso de producción para asegurar que sea escalable y viable a nivel industrial.
Paralelamente, el equipo trabajará en la protección intelectual del método de obtención, un paso fundamental para preparar su futura transferencia tecnológica y comercialización. Esto abrirá la puerta para que la industria alimentaria chilena pueda incorporar este desarrollo sostenible y basado en ciencia en sus productos.
Los planes a futuro son ambiciosos. Las investigadoras contemplan la creación de otros ingredientes funcionales derivados de distintas algas marinas, la realización de estudios clínicos para validar sus beneficios directamente en la salud humana y el fortalecimiento de los vínculos con empresas del sector.