Chile inaugura el Centro Espacial Nacional para fabricar sus propios satélites
Tiempo de lectura: 2 minutos La Fuerza Aérea de Chile (FACh) puso en marcha el Centro Espacial Nacional (CEN) en Cerrillos, una infraestructura que permitirá al país fabricar sus propios satélites y procesar datos para enfrentar desafíos climáticos y territoriales.
La Fuerza Aérea de Chile (FACh) inauguró oficialmente el Centro Espacial Nacional (CEN). Ubicado en la Base Aérea «Los Cerrillos», este centro de 5.800 metros cuadrados surge como respuesta a la necesidad de contar con capacidades propias para la toma de decisiones estratégicas.
Según se destacó en la ceremonia de inauguración, encabezada por el Presidente de la República, el CEN funcionará como un «HUB» nacional donde convergerán la academia, la industria privada y el sector público para impulsar la innovación y el desarrollo de capital humano avanzado.
El jefe de Estado destacó que «esta es una de las obras y proyectos más importantes alcanzados por Chile en materia de ciencia y tecnología».
«Hoy es un día para estar felices y orgullosos porque el conocimiento de frontera que alberga está llamado a desarrollar más beneficios y proyectos para Chile. Es un trabajo interministerial, pero además, entre el sector público, el sector privado, la academia, la sociedad civil y la Fuerza Aérea», añadió.
Por su parte, el ministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Aldo Valle, puntualizó que el centro «fortalece nuestras capacidades espaciales, impulsa la innovación y la formación de talento, y proyecta a Chile como un referente regional en ciencia y tecnología espacial».
Laboratorios y fabricación de satélites
El Centro Espacial Nacional está dividido en cuatro áreas diseñadas para cubrir todo el ciclo de vida de la tecnología espacial. Una de las instalaciones más destacadas es el Laboratorio de Desarrollo de Tecnologías Espaciales, el cual cuenta con una sala blanca certificada ISO 7. Este espacio de ambiente controlado permitirá a ingenieros chilenos avanzar en el diseño y construcción de ocho satélites propios: siete de micro-tamaño (23 kg) y uno de observación terrestre de mayor envergadura (200 kg).
Además de la fabricación, el CEN alberga un Centro de Control de Misión, desde donde se operarán de forma autónoma los sistemas satelitales de comunicaciones y observación. Para gestionar el enorme volumen de información generado, el complejo incluye un Laboratorio de Ciencia de Datos equipado con capacidades de supercómputo e Inteligencia Artificial.
Complementando estas áreas, el Laboratorio de Emprendimiento e Innovación actuará como puente con el sector privado y las universidades, fomentando la creación de startups de base tecnológica y la formación de especialistas en astrofísica y sistemas satelitales.
Un activo para la ciencia y el desarrollo civil
Además del desarrollo de satélites, el CEN busca beneficiar a áreas productivas y científicas. La disponibilidad de datos geoespaciales propios, por ejemplo, permitirá mejorar la precisión en áreas como:
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Monitoreo medioambiental: Seguimiento detallado del cambio climático, glaciares y recursos hídricos.
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Gestión de emergencias: Respuesta rápida ante desastres naturales mediante imágenes en tiempo real.
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Productividad nacional: Optimización de recursos en la agricultura, minería, pesca y sector forestal.
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Planificación territorial: Herramientas precisas para el desarrollo urbano y rural.
Con la puesta en marcha de esta infraestructura, Chile busca convertirse en un actor con autonomía en el dominio espacial. Este avance, que se nutre de la experiencia de misiones previas como el FASAT Charlie, proyecta al país hacia una nueva era donde el espacio es un territorio de oportunidades para mejorar la calidad de vida.