Norka Fuentes: La limnóloga al servicio del ecosistema marino chileno
Tiempo de lectura: 2 minutos La directora del Laboratorio de Limnología de la Universidad de Los Lagos recuerda su interés por la vida oceánica desde que era pequeña, lo que la llevó a contribuir a la protección marina.
Norka Fuentes, directora del Laboratorio de Limnología de la Universidad de Los Lagos (ULagos), lidera una investigación sobre los ecosistemas acuáticos continentales de Chile. Su trabajo no solo se centra en la caracterización y ecología de ríos, lagos y humedales, sino que también impulsa la conservación y la educación científica, inspirando a futuras generaciones de científicas a través de programas como Provoca. Desde Osorno, la bióloga marina comparte su trayectoria y la relevancia de la limnología en tiempos de cambio climático.
Desde temprana edad, la curiosidad de Norka por la flora, fauna y vida oceánica se encendió durante sus exploraciones familiares y se consolidó con los documentales de Jacques Cousteau, llevándola a estudiar Biología Marina. Esta pasión la condujo al campo de la limnología, una rama de la ecología que estudia los ecosistemas acuáticos no marinos, analizando la biodiversidad, las interacciones entre organismos y su relación con el ambiente.
«Me encantaban los talleres de ciencia en el colegio, cuando teníamos que mirar, ocupar los microscopios, las lupas, cuando hablaban de las células», recuerda Fuentes, destacando la influencia de sus profesoras de ciencia en el Colegio Carmela Carvajal.
Innovación y participación femenina
Chile, con su vasta diversidad geográfica, reúnes todas las características necesarias para el desarrollo de la limnología. Desde los años 70, la llegada de expertos internacionales ha cimentado las bases para el estudio de los cuerpos de agua. El laboratorio de la ULagos ha expandido esta labor, enfocándose no solo en la caracterización química, física y biológica, sino también en la ecología de estos ecosistemas.
Una de las líneas de investigación de Norka es la conservación de la biodiversidad, particularmente a través del estudio de invertebrados acuáticos como las ninfas de insectos (efemerópteros y plecópteros). Estos organismos actúan como bioindicadores de contaminación y calidad ecológica, revelando la salud de los ecosistemas. Un estudio reciente en lagunas agrícolas de la provincia de Osorno demostró que estas actúan como «hotspots» o «islas ecológicas», albergando una rica biodiversidad y funcionando como refugio para aves e invertebrados.
«Es importante encontrar en forma asertiva qué condiciones tiene la ambiental de ese cuerpo de agua para poder mitigar los efectos de la contaminación, detener las amenazas«, enfatiza Fuentes.
Ciencia con impacto social
Norka subraya la importancia de una ciencia que no se limite al laboratorio, sino que tenga un vínculo con el territorio y la comunidad. El trabajo con comunidades indígenas y ciudadanos locales en Osorno, a través de monitoreos participativos, es fundamental para lograr la «gobernanza local». «No podemos apartar la gente de la ciencia. Ellos son los que entregan las herramientas, las capacitaciones, pero que al final ellos sean los guardias vigilantes de su ecosistema hídrico», sostiene.
Además de su labor investigadora, Fuentes se ha dedicado a motivar a las niñas hacia las carreras científicas a través de talleres prácticos con el programa Provoca. Mediante charlas, trabajo en terreno y laboratorio, las jóvenes aprenden a identificar bioindicadores y a determinar la calidad del agua, una experiencia que, según la bióloga marina, las empodera y las lleva a considerar la limnología y otras ciencias.
«Siento que con eso y con las conversaciones en terreno veo que algunas se están motivando para estudiar carreras de ciencia», comparte. Esta mentoría busca romper barreras y mostrar que, con perseverancia, es posible ser científica: «Si una tiene las ganas y es perseverante, sí se puede ser una científica, y eso es lo que trato de demostrar«.
 
 
 
 
