Estudio destaca el potencial de aguas lluvias como solución de bajo costo para la sequía
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Tiempo de lectura: 2 minutos Investigadores del Centro Regional de Estudios Ambientales (CREA) demostraron la efectividad de los Sistemas de Captación de Aguas Lluvias (SCALLs) como una estrategia costo-efectiva para el riego agrícola en Biobío y Ñuble.
El avance del cambio climático ha exacerbado la escasez hídrica en las zonas rurales del centro-sur de Chile, impactando severamente a la agricultura familiar campesina.
En este contexto, una investigación desarrollada por el Centro Regional de Estudios Ambientales (CREA) de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC) demuestra la viabilidad técnica y económica de los Sistemas de Captación de Aguas Lluvias (SCALLs) para fortalecer la resiliencia hídrica de la agricultura familiar en las regiones de Biobío y Ñuble.
El equipo, encabezado por Robinson Sáez, director del CREA-UCSC, presenta evidencia robusta sobre la efectividad de los SCALLs como una alternativa de bajo costo y alto impacto.
SCALLs: Eficacia hídrica y autonomía para el campo
Los Sistemas de Captación de Aguas Lluvias se perfilan como una solución estratégica para el sector agrícola. «El estudio mostró que los SCALLs son eficaces para proveer agua para riego agrícola en áreas donde el acceso es limitado o inexistente. Su instalación representa una inversión baja y su mantenimiento puede ser realizado por las propias comunidades beneficiadas», explicó Sáez.
Esta tecnología no solo resulta más económica que alternativas tradicionales como la extensión de redes públicas o el uso de camiones aljibe, sino que también fomenta la autonomía hídrica local.
«Permiten mantener cultivos, huertos y animales durante periodos secos. Y al reducir la dependencia de fuentes externas, como camiones aljibe, ayudan a las familias a enfrentar mejor los efectos del cambio climático», añadió el director del CREA-UCSC. Proyectos piloto en sectores rurales de Ñuble y Biobío, donde el centro ha trabajado directamente con las comunidades, ya demuestran su éxito.
Desafíos para su masificación
A pesar de los prometedores resultados, la expansión de los SCALLs a nivel nacional enfrenta obstáculos significativos. Uno de los principales es la falta de una regulación específica para el diseño y uso de estos sistemas; actualmente, deben ajustarse a normativas pensadas para agua potable o riego tradicional, lo que no siempre es adecuado.
Sumado a esto, existe una limitada capacidad instalada y una escasez de personal capacitado en el diseño, implementación y mantenimiento de SCALLs en el país.
Robinson Sáez advierte además que «la diversidad climática y de condiciones urbanas del país impone la necesidad de adaptar estos sistemas a contextos muy distintos, dificultando su estandarización«. La ausencia de un sistema de monitoreo y evaluación sistemática de su desempeño también limita la generación de evidencia para el diseño de políticas públicas efectivas que impulsen esta solución.
