Deshielo de glaciares podría causar erupciones volcánicas más frecuentes en Chile

Créditos: Pablo Moreno-Yaeger / UW-Madison
Tiempo de lectura: 2 minutos Una investigación enfocada en seis volcanes de los Andes chilenos establece una conexión entre la pérdida de masa glaciar y la actividad magmática subterránea, un hallazgo con implicaciones globales que pone a Chile en el centro de la atención.
Un reciente estudio internacional, enfocado en seis volcanes de los Andes chilenos, advierte que el deshielo acelerado por el cambio climático podría provocar un aumento en la frecuencia y la explosividad de las erupciones volcánicas. La investigación, presentada en la conferencia de la Asociación Europea de Geoquímica, revela una peligrosa conexión entre la pérdida de masa glaciar y la actividad magmática subterránea, un fenómeno con implicaciones globales.
El estudio advierte que el cambio climático no solo derrite el hielo, sino que también podría estar despertando a los gigantes dormidos bajo él. Aunque la relación ya se había estudiado en Islandia, este es uno de los primeros análisis profundos en un sistema volcánico continental como el chileno.
Los seis volcanes chilenos
Para llegar a estas conclusiones, el equipo científico, liderado por investigadores de universidades estadounidenses, analizó seis volcanes del sur de Chile, incluyendo el inactivo Mocho-Choshuenco. Mediante datación por argón y análisis de cristales en rocas de erupciones pasadas, reconstruyeron la historia volcánica de la región y su vínculo con el avance y retroceso de la capa de hielo de la Patagonia.
Los resultados indicaron que durante el apogeo de la última glaciación (hace unos 20 mil años), la inmensa y pesada capa de hielo suprimió la actividad volcánica, actuando como una «tapa» que permitió la acumulación de grandes reservas de magma rico en sílice a unos 10-15 kilómetros de profundidad. Sin embargo, cuando los glaciares comenzaron a derretirse, la repentina liberación de presión provocó que los gases del magma se expandieran violentamente, dando lugar a erupciones mucho más explosivas.
El investigador de la Universidad de Wisconsin-Madison y uno de los autores, Pablo Moreno-Yaeger, explica que «los glaciares tienden a rebajar el volumen de las erupciones volcánicas que hay bajo los mismos, pero a medida que los glaciares retroceden debido al cambio climático, nuestro estudio indica que estos volcanes entran en erupción con mayor frecuencia y de forma más explosiva».
Una advertencia global y un peligroso círculo vicioso
Aunque el estudio se centró en Chile, sus implicaciones son globales. Los científicos subrayan que cientos de volcanes inactivos bajo glaciares en la Antártida, América del Norte, Nueva Zelanda y Rusia podrían reactivarse a medida que el deshielo se acelera. Lo que el equipo observó en los Andes es un modelo aplicable a otras regiones que «merecen ser muy vigiladas».
Afortunadamente, según Moreno-Yaeger, aunque la respuesta volcánica es geológicamente casi instantánea, el proceso de cambio en el sistema magmático es gradual y tarda siglos, lo que da tiempo para la vigilancia y la alerta temprana.
Además, este fenómeno podría generar un efecto de retroalimentación climática. Si bien una erupción aislada como la del Monte Pinatubo (Filipinas) en 1991 puede enfriar temporalmente el planeta por los aerosoles liberados, una sucesión de erupciones múltiples podría tener el efecto contrario, aumentando la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera.
«Esto crea un círculo vicioso en el que el deshielo de los glaciares provoca erupciones y estas, a su vez, podrían contribuir a un mayor calentamiento y deshielo», advierte Moreno-Yaeger.