CONAF confirma extracción ilegal de la corteza del «Coihue Abuelo», un ejemplar de 600 años
Tiempo de lectura: 2 minutos La Corporación Nacional Forestal (CONAF) denunció la extracción ilegal de alrededor de 50 centímetros de alto por 20 centímetros de ancho de corteza en este monumento natural, ícono de la biodiversidad en la región de Los Ríos.
La Reserva Nacional Mocho Choshuenco, ubicada en la Región de Los Ríos, es el hogar de un gigante silencioso que ha sido testigo de la historia natural de Chile durante seis siglos. Se trata del «Coihue Abuelo», un ejemplar de Nothofagus dombeyi de aproximadamente 600 años de antigüedad, que hoy se encuentra en peligro tras sufrir un ataque directo por parte de visitantes irresponsables.
La Corporación Nacional Forestal (CONAF) Los Ríos confirmó la extracción ilegal de la corteza del Coihue Abuelo. El hallazgo fue realizado durante un patrullaje de rutina. «En un patrullaje realizado por nuestros guardaparques, hemos encontrado un daño que afecta a una especie tan relevante como el Coihue Abuelo. Hacemos un llamado a la ciudadanía a resguardar y proteger nuestros recursos naturales, sobre todo en nuestras unidades de áreas protegidas de la región», declaró el director regional de CONAF, Arnoldo Shibar.
Cabe destacar que este árbol es monitoreado desde hace años por investigadores de la Universidad Austral de Chile (UACh) debido a su longevidad y su rol en el bosque templado lluvioso.
Atentado a la historia viva del bosque
Cristián Álvarez, administrador de la unidad, relató que el hallazgo se produjo el pasado sábado 29 de noviembre, mientras el equipo de guardaparques realizaba labores de investigación de fauna, específicamente buscando nidos de carpintero negro (Campephilus magellanicus).
Al inspeccionar la parte posterior del tronco del Coihue Abuelo, el equipo se percató de una intervención humana reciente. «Encuentran un sacado de la corteza de más o menos 50 centímetros de alto por 20 centímetros de ancho. Hace un mes no estaba allí, por lo que sabemos que es un daño reciente», detalló Álvarez.
Desde una perspectiva biológica, la extracción de corteza en un árbol centenario no es un daño superficial. La corteza actúa como la piel del árbol, protegiendo el floema y el xilema, los sistemas vasculares por donde circulan los nutrientes y el agua. Al retirar esta capa protectora, se expone al ejemplar a un estrés fisiológico severo.
«Esto puede tener efectos graves por el posible ingreso de patógenos al individuo». Hongos, bacterias e insectos xilófagos pueden aprovechar esta herida abierta para colonizar el árbol, lo que podría comprometer su salud a largo plazo e incluso acelerar su muerte.
Multas y sanciones por el daño
El marco legal que protege a este tipo de ejemplares es la Ley 20.283 sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal. Esta normativa sanciona explícitamente la extracción de corteza, el daño, la mutilación o cualquier intervención no autorizada en especies nativas. Las consecuencias para los infractores son multas económicas que oscilan entre las 5 y 50 UTM por cada árbol afectado, el decomiso del material biológico extraído y procesos penales en caso de que sea un daño significativo.
El estado actual del Coihue Abuelo será evaluado por especialistas para determinar si requiere medidas de protección adicionales, como cercos perimetrales más restrictivos o tratamientos fitosanitarios para sellar la herida.
Desde CONAF reiteran el llamado a los turistas que visitan la Reserva Nacional Mocho Choshuenco a cuidar y respetar el entono. Ante cualquier conducta sospechosa o intervención en la flora nativa, los visitantes pueden denunciar inmediatamente a los guardaparques.