Sarampión: Minsal urge vacunación a nacidos entre 1971 y 1981 por inmunidad incompleta
Tiempo de lectura: 2 minutos Esta medida preventiva busca reforzar la inmunidad de este grupo etario ante el resurgimiento de brotes de esta enfermedad viral, altamente contagiosa, en diversas partes del mundo.
El sarampión, una enfermedad que muchos consideraban controlada e incluso eliminada en algunas regiones, vuelve a ser motivo de preocupación sanitaria global. Aunque Chile no ha registrado casos autóctonos recientes gracias a su robusto programa de inmunización, el riesgo de importación de casos es una realidad latente.
«La única enfermedad erradicada en la historia ha sido la viruela. El sarampión ha sido controlado en algunos países, algunos declararon su eliminación, pero no se ha ocupado el concepto de erradicación», aclara el Dr. Alexis Kalergis, director del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII).
El también académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile subraya que la disminución de las tasas de vacunación en diversos países ha provocado la reaparición de casos graves e incluso fallecimientos por esta enfermedad, que es «absolutamente prevenible con una vacuna segura y muy efectiva». Este escenario internacional justifica la proactividad del Minsal para proteger a la población chilena.
La «Generación X» chilena y la dosis que falta
El llamado del Minsal se centra en un grupo específico: aquellos nacidos entre los años 1971 y 1981. La razón es fundamental: durante ese período, el esquema de vacunación contra el sarampión en Chile contemplaba la administración de una sola dosis. «Sabemos que para la vacuna del sarampión son necesarias dos dosis para lograr una inmunidad robusta y duradera», explica el Dr. Kalergis. «Las personas que nacieron en ese período probablemente solo recibieron una dosis, por lo tanto, tienen una menor inmunidad».
Esta campaña busca cerrar esa brecha inmunológica. «El llamado que está haciendo el Minsal es correcto«, afirma el director del IMII. «Que esas personas que solamente recibieron una dosis vayan con su carnet de identidad, se identifiquen, y eso los hace calificar para recibir esta dosis y completar su programa de inmunización».
El sarampión es extremadamente contagioso; según Kalergis, «es más contagioso que el coronavirus. Si una persona contagiada con sarampión se contacta en un instante con 10 personas, nueve se contagian. Incluso si una persona infectada estuvo en una sala, quienes ingresen horas después pueden contagiarse».
Vacuna gratuita: ¿Para qué grupos?
La vacuna contra el sarampión ofrecida en esta campaña es parte del Programa Nacional de Inmunizaciones, lo que significa que es gratuita para la población objetivo. Se trata de la vacuna tresvírica (o trivírica), que protege no solo contra el sarampión, sino también contra la rubéola y la parotiditis (paperas). Acudir a los vacunatorios con el carnet de identidad es el único requisito para acceder a esta protección.
El Dr. Kalergis también destaca un punto crucial: la vacunación no solo protege al individuo, sino también a la comunidad, especialmente a los más vulnerables, como los bebés menores de un año que aún no pueden recibir la primera dosis. «Los bebés, por ejemplo, son tremendamente susceptibles y están protegidos porque la población está vacunada. Tenemos que mantener la tasa de vacunación alta«, enfatiza.
Finalmente, ante la consulta sobre si una persona que tuvo sarampión en la niñez debe vacunarse, el experto indica que el sistema inmune se debilita con la edad (inmunosenescencia), por lo que recibir refuerzos, especialmente si se está en el grupo convocado, es beneficioso. La recomendación es clara: quienes nacieron entre 1971 y 1981 deben acudir a vacunarse para completar su esquema y fortalecer las barreras contra el sarampión en Chile.
