Psicóloga advierte efectos en rendimiento académico y laboral por ajuste horario

Tiempo de lectura: 2 minutos «Este cambio puede producir alteraciones en nuestro ciclo de sueño-vigilia», asegura la psicóloga Nerkis Fuentes Domínguez respecto al cambio de horario programado para la medianoche del domingo 6 de abril.
El nuevo horario implicará que amanezca y oscurezca más temprano, permitiendo de esa manera aprovechar mejor la luz solar durante las horas de mayor actividad. Sin embargo, esta cambio podría provocar alteraciones del sueño y, como consecuencia, afectar también el rendimiento académico y laboral de algunas personas.
«Este cambio puede producir alteraciones en nuestro ciclo de sueño-vigilia, el que podría verse alterado por cambios en los niveles de cortisol y melatonina de nuestro organismo, lo que provocaría cambios en el estado de ánimo, por lo tanto, también una mayor sensación de agotamiento, de falta de energía, insomnio y menos motivación o disposición para hacer nuestras actividades del día a día», explicó la profesional.
Pero el ajuste tendría también un costo «porque la somnolencia que experimentamos o el estado de ánimo bajo, deprimido o la baja motivación, nos hace que cognitivamente tengamos menos capacidad para procesar o retener información para llevar a cabo tareas del día a día. Esto va conjugado con experimentar una mayor sensación de estrés subjetivo o carga subjetiva y mayor irritabilidad o baja tolerancia a las frustraciones», explicó la profesional.
Distintas reacciones
Eso sí, el cambio de hora podría afectar a las personas de distintas formas. Según explicó la psicóloga, las personas con trastornos del ánimo, depresivos, ansiosos o con baja tolerancia a la frustración son más proclives a generar sintomatología asociada a la reducción de luz.
«Hay grupos que son más vulnerables (…). Por lo tanto, la reducción de luz solar puede afectar la producción de serotonina, pueden experimentar más tristeza, un estado de ánimo más bajo y mayor necesidad de querer dormir», indicó Fuentes Domínguez.
Para mitigar estos efectos, la Dra. (c) Fuentes recomendó ajustar progresivamente el hábito de sueño y lentamente comenzar a adelantar la hora de sueño, evitando así que el cambio sea brusco al momento de adelantar los relojes.
«También es bueno ponerse a la luz solar, especialmente en la mañana, incluso cuando los días sean nublados. Esto se puede conjugar con hacer actividades al aire libre y disfrutar de la luz del sol para obtener vitamina D que es favorable para nuestro organismo y nuestro estado de ánimo», recomendó.
Otra acción que se puede realizar para apoyar a la adaptación del nuevo horario es limitar el uso de pantallas durante la noche, sobre todo antes de dormir, evitando de esta manera la activación que produce la luz azul a nuestro cerebro. En la misma línea, recomendó evitar el consumo de cafeína y alcohol durante la tarde para propiciar una higiene del sueño adecuada.
En cualquier caso, recomendó consultar con un especialista en salud mental para atender cualquier malestar emocional que pudiera estar vinculado al cambio de horario y así lograr un mayor bienestar.