Desarrollan hidrogel con nanotecnología y Ciprés de las Guaitecas para combatir el acné
Tiempo de lectura: 2 minutos Liderado por la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Chile, la iniciativa busca validar una fórmula nanoencapsulada que promete ser más efectiva y natural que los tratamientos sintéticos tradicionales para el acné.
Un equipo de investigadores, encabezado por el académico René Carmona de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, está desarrollando un producto para el tratamiento del acné. Esta afección, que impacta la calidad de vida de gran parte de la población, podría encontrar una respuesta definitiva gracias a la unión entre la riqueza botánica del sur del país y la precisión de la nanotecnología.
El proyecto tiene como eje central la validación clínica de un hidrogel formulado a base de aceite esencial de Ciprés de las Guaitecas (Pilgerodendron uviferum). A diferencia de los tratamientos convencionales, que suelen depender de compuestos sintéticos con posibles efectos secundarios, esta propuesta apuesta por un origen natural.
El corazón de esta innovación reside en la materia prima: un aceite esencial clasificado como Producto Forestal No Maderero (PFNM). Este insumo no se obtiene de procesos industriales masivos, sino que es extraído directamente por productores locales de zonas extremas de la Región de Aysén, como Cochrane, La Junta y Melinka.
Valor agregado desde la Patagonia
El objetivo de la investigación es, por un lado, busca otorgar un valor agregado significativo a los recursos forestales nativos, transformando una especie emblemática como el Ciprés de las Guaitecas en un insumo biotecnológico de exportación. Por otro, pretende ofrecer una alternativa terapéutica frente a los productos sintéticos que dominan el mercado dermatológico actual.
La estrategia del equipo para diferenciar el producto radica en la metodología de formulación. No se trata de aplicar un extracto sobre la piel, sino de someterlo a un proceso de formación de nanopartículas. Esta técnica permite encapsular el aceite esencial, aumentando su estabilidad y logrando una acción más profunda y efectiva en la piel para combatir las bacterias causantes del acné.
Del laboratorio a la validación clínica
Para materializar esta solución, en una primera etapa, el foco está puesto en certificar científicamente la actividad antibacteriana del aceite suministrado por los productores de la Patagonia. El objetivo es demostrar que la materia prima base posee las propiedades biológicas necesarias para inhibir los patógenos cutáneos antes de procesarla.
Posteriormente, basándose en una fórmula exitosa desarrollada previamente a escala de laboratorio (con apoyo de la Fundación para la Innovación Agraria, FIA), los investigadores trabajarán en aumentar la producción en una proporción de 1 a 10. Durante esta fase, se estudiarán las variables críticas de fabricación para asegurar la estandarización de un prototipo de hidrogel tópico de alta calidad.
La fase final y más decisiva será la validación clínica. Una vez estabilizado el prototipo, se realizarán pruebas controladas en personas que padecen acné actualmente. El objetivo es demostrar empíricamente las propiedades beneficiosas del gel en un entorno real.