Chile y Google firman acuerdo para el primer enlace de fibra óptica directo con Oceanía y Asia

Tiempo de lectura: 2 minutos El cable Humboldt será la primera infraestructura submarina de fibra óptica en conectar directamente Sudamérica con Oceanía y Asia, prometiendo revolucionar la conectividad digital de la región.
Un hito en la conectividad digital de Latinoamérica se materializó este miércoles con la firma del acuerdo entre Chile, a través de Desarrollo País, y Google. Juntos construirán el Cable Humboldt, la primera infraestructura submarina de fibra óptica que cruzará el Pacífico Sur, uniendo directamente Valparaíso con Sídney, Australia, y abriendo una nueva puerta digital de Sudamérica hacia Oceanía y el continente asiático.
El proyecto es una pieza clave en la estrategia de Chile para consolidarse como un «hub digital» en la región, mejorando la conectividad, resiliencia y soberanía digital del país. Esta nueva ruta transoceánica promete transformar el panorama de las telecomunicaciones y el intercambio de datos a nivel continental.
El Cable Humboldt, un nombre que rinde homenaje al célebre biólogo, geógrafo y humanista prusiano Alexander von Humboldt, considerado el padre del ecologismo y un explorador clave del continente americano en el siglo XIX, se extenderá por aproximadamente 14.800 kilómetros bajo el Océano Pacífico. Esta monumental obra de ingeniería conectará la ciudad costera de Valparaíso, en Chile, con Sídney, en Australia.
Un puente digital transpacífico sin precedentes
Con una capacidad de transmisión de datos de 144 terabytes por segundo (Tbps) –equivalente a descargar millones de fotografías de alta resolución en un segundo– y una vida útil proyectada de 25 años, esta infraestructura está destinada a revolucionar el flujo de información. Las obras para su instalación están programadas para comenzar durante este año, con una fecha de finalización estimada para 2027.
«Este proyecto le dará a Chile mayor resiliencia y fortalecerá su soberanía digital», explicó el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz. La autoridad destacó también que actualmente las conexiones submarinas del país se dirigen principalmente hacia el norte, lo que genera ciertas vulnerabilidades que el Cable Humboldt ayudará a mitigar.
Chile como hub digital
La visión detrás del Cable Humboldt es ambiciosa: consolidar a Chile como un «hub digital» para Sudamérica. Esta conexión directa con Sídney no solo mejorará la latencia y la calidad de las comunicaciones con Oceanía, sino que también establecerá una puerta de entrada privilegiada a los crecientes mercados digitales de Asia.
La resiliencia es otro pilar fundamental. Como recordó el ministro Muñoz, Chile, a pesar de contar con uno de los servicios de internet más rápidos de la región, es un país «permanentemente expuesto a fenómenos naturales como terremotos y deslizamientos submarinos». Por ello, «es oportuno buscar nuevas rutas» que aseguren la continuidad de las comunicaciones vitales para la economía y la sociedad.
Cristian Ramos, director de Infraestructura de Telecomunicaciones de Google para Latinoamérica, aseguró que el cable «traerá inversión en el sector de la economía digital y en otras áreas tan diversas como la minería o la astronomía«. Este último punto es crucial para Chile, hogar de algunos de los observatorios astronómicos más importantes del mundo, que generan ingentes cantidades de datos que podrán ser transmitidos y procesados con mayor eficiencia gracias a esta nueva superautopista digital.