«No podemos explicar»: Enigmáticas luces fueron captadas por cámara trampa en la Patagonia
Tiempo de lectura: 2 minutos Investigadores de la Universidad de Magallanes (UMAG) registraron tres imágenes de un objeto luminoso no identificado que se desplazaba a gran velocidad en una zona remota al norte de Punta Arenas.
Lo que comenzó como un monitoreo rutinario de ecosistemas terrestres se transformó en un descubrimiento extraordinario. Investigadores del Grupo de Estudios Ambientales (GEA) de la Universidad de Magallanes (UMAG) se encontraron con una sorpresa al revisar el material de una de las cámaras trampa instaladas para el proyecto «Líneas de Base Públicas para las Provincias de Magallanes y Tierra del Fuego». El dispositivo, ubicado a 54 kilómetros al norte de Punta Arenas, capturó un evento sin precedentes en la investigación científica de la región.
El registro ocurrió la madrugada del 21 de enero de 2024, a las 00:22 horas. En un lapso de apenas dos segundos, la cámara tomó tres fotografías que muestran una serie de luces intensas en un aparente movimiento descendente.
«En una cámara que estaba al borde de una vega bastante lejos de cualquier camino público (…), aparecieron una luces que no podemos explicar, porque la cámara está ‘seteada’ para que tome tres fotos en simultáneo cuando se activa el sensor y esas fotos las toma en solo segundos, entonces en ese micro lapso, estas luces, que aparentemente se ve que están lejos -a menos que sean luces muy chicas- se acercan y quedan al frente de la cámara, encandilándola, en un movimiento que parece que fuera descendente», relató el biólogo Alejandro Kush Schwarzenberg, parte del equipo, a UMAG TV.
El equipo de la UMAG descartó que se tratara de fauna, vehículos o cualquier otro fenómeno habitual en la zona, lo que motivó a derivar el caso para un análisis más profundo.
Las hipótesis de los expertos
Para comprender la naturaleza del evento, las imágenes fueron enviadas a la Dirección General de Aeronáutica Civil (SEFAA), al Museo OVNI de La Serena y a especialistas en fenómenos aéreos anómalos. Tras realizar un análisis técnico, que incluyó trayectoria, espectrografía y relieve, el investigador OVNI Freddy Alexis Silva calificó el hallazgo como «mind blowing» (impresionante). El dato más revelador fue la velocidad del objeto: aproximadamente 947 km/h, equivalente a Mach 0.7, casi la velocidad del sonido.
«Esto ya entra dentro de los registros de lo que serían los fenómenos aéreos anómalos no identificados (FAN)», señaló Silva, quien plantea la hipótesis de que podría tratarse de un «plasmoide», una forma de plasma exótico de corta duración, un fenómeno estudiado principalmente por investigadores en Rusia. Esta explicación, aunque preliminar, subraya el carácter inusual del avistamiento.
Rodrigo Bravo Garrido, también investigador del GEA UMAG, destacó el valor del registro: «Fenómenos en Patagonia sí han existido, hay reportes, registros, qué sé yo historia, pero en una investigación científica y que fuese reconocida más por el académico que está a cargo de este proyecto o de esta parte del proyecto, creo que es primera vez y algo muy inédito«.
«Abre una brecha para entender que, quizás estos fenómenos que de forma casual o fortuita se lograron captar, haya que investigarlos en mayor profundidad en algún momento», agregó Bravo.
El carácter científico de la captura le otorga una validez única. Cristián Riffo, director del Museo OVNI, afirmó que el registro formará parte de su museografía, destacando que «no es habitual recibir imágenes de este tipo provenientes de un proyecto científico. Este carácter único le otorga gran relevancia, y sin duda formará parte de nuestra museografía para que el público conozca el contexto y rigor con que fueron obtenidas».