Fotografía para la conservación: Concurso mundial revela la urgencia de salvar los manglares
Tiempo de lectura: 2 minutos El Mangrove Action Project (MAP) ha anunciado a los ganadores de los Premios de Fotografía de Manglares 2025, una competencia que este año batió récords con 3.303 imágenes de 78 países.
Los manglares son verdaderas potencias ecológicas. Estos bosques costeros, presentes en 125 países, son capaces de capturar hasta cinco veces más carbono que los bosques terrestres, convirtiéndose en aliados fundamentales para mitigar el calentamento global. Además, protegen a más de 15 millones de personas de inundaciones, sustentan la pesca artesanal de innumerables comunidades y sirven como hábitat crucial para una vasta biodiversidad marina y terrestre.
A pesar de sus incalculables beneficios, estos ecosistemas enfrentan una amenaza existencial. Según datos del Mangrove Action Project (MAP), el 50% de los manglares del mundo corre el riesgo de colapsar para 2050. La expansión urbana, la deforestación, la acuicultura y, sobre todo, el aumento del nivel del mar, están provocando su deterioro a un ritmo alarmante.
Con el objetivo de poner rostro a esta crisis, MAP ha anunciado a los ganadores de los Premios de Fotografía de Manglares 2025. «Al despertar la curiosidad sobre el importante papel que desempeñan los manglares en la vida de todos, buscamos generar una conexión emocional más profunda que impulse a las personas a actuar», afirma Leo Thom, fundador de los premios.
Una imagen para la conciencia: La historia tras la foto ganadora
El galardón principal de Fotógrafo de Manglares del Año 2025 fue para el ecologista y fotógrafo de conservación Mark Ian Cook por su obra «Vista de pájaro de la caza». La imagen, captada con un dron, muestra espátulas rosadas sobrevolando a un tiburón limón que caza en las aguas bordeadas de manglares de la Bahía de Florida, Estados Unidos.
Lo que a primera vista parece una escena de equilibrio natural, es en realidad un dramático testimonio del impacto del cambio climático. Cook explica que el aumento del nivel del mar está alterando el hábitat de alimentación de las espátulas. «Históricamente, la Bahía de Florida fue la principal región de anidación de la espátula rosada en EE. UU., pero esta especie se está volviendo cada vez más rara allí», advierte el fotógrafo.
Las espátulas necesitan aguas poco profundas para alimentarse eficazmente, pero la subida del mar hace que estas zonas sean inaccesibles. «Con el aumento del nivel del mar, estas profundidades críticas son inalcanzables, la densidad de peces es insuficiente y menos aves pueden reproducirse», detalla Cook. Su fotografía no solo captura un instante de vida silvestre, sino que documenta un ecosistema al borde del colapso, donde unos pocos centímetros de agua deciden el futuro de una especie.
El jurado, compuesto por expertos como el biólogo marino Sirachai Arunrugstichai, destacó la calidad y diversidad de las historias visuales. «Estas fotografías contribuirán en gran medida a educar al público y, con suerte, inspirarán a las personas a hacer lo que puedan para salvar estos hábitats críticos«, concluyó la fotógrafa Tanya Houppermans. Junto al premio principal, se reconocieron trabajos en las categorías de Paisaje, Vida Silvestre, Submarino, Amenazas y Personas, reforzando el mensaje global de urgencia y esperanza.