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Chile será sede de la Escuela de Computación del CERN en enero de 2026

Chile será sede de la Escuela de Computación del CERN en enero de 2026

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Tiempo de lectura: 2 minutos El evento, organizado en colaboración con el Instituto Milenio SAPHIR, reunirá a expertos y estudiantes internacionales para abordar el futuro de la Inteligencia Artificial y el procesamiento de datos científicos.

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Entre el 11 al 24 de enero de 2026, Chile será el anfitrión de la CERN School of Computing (CSC), un evento académico de primer nivel organizado por la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN) en colaboración con el Instituto Milenio SAPHIR.

Este encuentro, que se realizará en el Campus Lo Contados de la Pontificia Universidad Católica de Chile, tendrá foco en formación avanzada sobre ciencias de la computación aplicadas a la física de altas energías. Durante su desarrollo, investigadoras, investigadores y estudiantes de diversas latitudes se darán cita en territorio nacional para profundizar en áreas como la computación científica, el procesamiento masivo de datos (Big Data), la inteligencia artificial (IA) y las tecnologías emergentes que están redefiniendo la investigación moderna.

Según explica Felipe Olivares León, director ejecutivo de SAPHIR, este hito valida la madurez que ha alcanzado la comunidad científica chilena. «El país cuenta con las capacidades técnicas, humanas y organizacionales necesarias para recibir actividades científicas de alto nivel, posicionándolo como un actor confiable dentro de la comunidad internacional de física de altas energías», asegura Olivares.

Beneficios «más allá de la academia»

Este reconocimiento internacional llega en un momento clave para la política científica del país. Actualmente, el Congreso se encuentra próximo a votar el acuerdo que permitiría a Chile convertirse en Estado Miembro Asociado de CERN. De aprobarse, se abrirían puertas inéditas no solo para la academia, sino para el sector productivo.

Olivares enfatiza que la vinculación con el laboratorio europeo genera un efecto positivo en la economía del conocimiento: «La vinculación con CERN genera beneficios que van más allá de la academia, creando oportunidades concretas para ingenieras, técnicos, profesionales de datos, especialistas en aceleradores y múltiples sectores industriales que hoy tienen alta demanda en las grandes colaboraciones científicas».

Formación y redes de colaboración

Uno de los aspectos más destacados de esta edición de la CERN School of Computing será su fuerte sello latinoamericano y la alta convocatoria lograda. El proceso de selección internacional fue riguroso: de un total de 133 postulaciones recibidas, solo 70 estudiantes lograron un cupo para participar en esta experiencia formativa de élite.

Además de una sólida representación de estudiantes de universidades públicas y privadas de Chile, el evento contará con participantes provenientes de México, Argentina, Brasil, Colombia, Perú, Costa Rica, Ecuador y Guatemala, sumándose a asistentes de Europa (Alemania, Francia, Suiza, España y Grecia).

Investigadoras e investigadores de SAPHIR formarán parte activa del cuerpo docente, impartiendo conocimientos técnicos y reforzando el liderazgo chileno en áreas claves del saber. Para los jóvenes seleccionados, la CSC ofrecerá un espacio para fomentar redes de colaboración duraderas (networking), transferencia tecnológica y nuevas alianzas entre instituciones.

Tal como resume la misión de SAPHIR, el objetivo final es «tender puentes entre la ciencia y la computación».


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